Hermanas y hermanos de todo el mundo. Gracias por vuestro sí al amor. Por abrir vuestros corazones al flujo de la divina unión. Hoy os invito nuevamente e meditar acerca de las relaciones que tenéis en vuestras vidas. Ellas dan testimonio de que lo acontece en vuestro interior. Esto se debe a que os relacionáis con los demás, con las cosas y todo lo que existe, tal como os relacionáis con vosotros mismos. En otras palabras, vuestras relaciones son un espejo donde podéis conoceros. Para ello están. Tal como todo lo que existe en la creación. Todo está ahí para que podáis cumplir le propósito de Dios. El cual no es posible alcanzarlo sin el conocimiento perfecto de lo que sois, pues forma parte de ello. Todo lo que existe cumple la función, no solamente de que os conozcáis de una sola vez, como si se tratara de un acto único. Sino para que permanezcáis en ese conocimiento de manera constante.
Amor a ti mismo
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Gracias por esta revelación. Antes de leer este escrito, hablaba por teléfono con mi tía hoy y le decía de amarse a una misma para poder amar a los demás. Ahora, creo que entiendo mejor qué es amarse a uno mismo. Gracias Sebastián por esta sincronicidad.😍